Amazon, acusada de vejar a sus empleados

Amazon ha estado en boca de muchos estos últimos días a raíz de un artículo de The New York Times que cuestionaba las prácticas que exigían a empleados, poniéndolos en situaciones límite. Sin embargo, el propio fundador y CEO de la compañía, Jeff Bezos, ha salido en defensa de su proyecto.

En un artículo publicado el pasado sábado, los periodistas Jodi Kantor y David Streitfeld aseguraban que la compañía experimenta con los límites que sus trabajadores están dispuestos a soportar, redefiniendo los límites de lo que es aceptable.

Según han expuesto en su artículo, Amazon expone a sus empleados 14 principios que trabajador de la compañía debe poner en práctica, entre los que se encuentran prácticas tan cuestionables como el destrozar las ideas de los demás en las reuniones, trabajar duro durante mucho tiempo y hasta tarde -incluso enviando emails de trabajo pasada la medianoche y exigir la respuesta-, el boicot del trabajo de los compañeros o el envío de informes secretos a distintos jefes.

Como respuesta al artículo, Bezos ha escrito un comunicado a sus empleados en los que les anima a leer el texto y a compararlo con las condiciones reales. En la misiva interna, Bezos ha explicado que «no describe el Amazon que conozco o el cariño de los ‘amazonians’ (trabajadores de Amazon) con los que trabajo cada día. Pero si conocéis alguna historia parecida, quiero que lo comuniquéis a Recursos Humanos», según ha recogido The Guardian.

Junto a Bezos, el responsable de Desarrollo de Infraestructura de la Experiencia de Búsqueda de Amazon, Nick Ciubotariu, también ha salido en defensa de la compañía para la que lleva trabajando 18 meses. En un texto escrito en su perfil de LinkedIn, el ejecutivo ha explicado que no ha visto nunca a nadie llorar en las oficinas, a pesar de que se trata de una de las declaraciones recogidas en el artículo del diario estadounidense. Sin embargo, deja caer que tratar con dureza a los empleados es algo que sí ocurrió en el pasado.

«Amazon solía quemar a mucha gente», ha explicado Ciubotariu. «Ya no hacemos las cosas así y no es la forma en la que llevo mi departamento. Quiero que este sea un sitio donde la gente resuelva los problemas que no pueden resolverse, en cualquier parte, pero que se sientan a gusto trabajando para una gran compañía al mismo tiempo. Y si quemas a la gente con sobretrabajo, no estás haciendo las cosas bien y necesitas una corrección de curso o necesitas estas aquí».

«Es el gran lugar donde odio trabajar»

El artículo publicado el sábado en The New York Times recoge las declaraciones de cien personas que han pasado un tiempo como empleados de Amazon o son en la actualidad trabajadores de la compañía líder en comercio ‘online’.

En él, se cita, entre otros, a Bo Olson, quien pasó dos años en el departamento de Marketing de Libros, tiempo durante el cual para él lo raro era no ver a gente llorando en sus mesas. «Sales de la sala de reuniones y verás a un hombre adulto tapándose la cara. Casi a cada una de las personas con las que he trabajado las he visto llorar en sus mesas», ha comentado Olson.

La situación descrita por Olson es compartida por el exejecutivo de la compañía, John Rossman. «Mucha gente que trabaja allí siente esta tensión: es el gran lugar donde odio trabajar». Rossman es autor del libro ‘The Amazon Way’ donde expone los 14 principios de liderazgo en los que se basa la compañía para llegar a lo más alto.

«Esta es una empresa que se esfuerza por hacer cosas realmente grandes, innovadoras y revolucionarias, y esas cosas no son fáciles», ha comentado la reclutadora de Amazon, Susan Harker. «Cuando apuntas a la luna, la naturaleza del trabajo es realmente exigente. Para algunas personas eso no funciona».