Bonny adeuda a sus empleadas pagas, liquidaciones y zafras por 2,7 millones

El Grupo responde al SITCA que solo debe un millón por el retraso en el cobro de las subvenciones agrícolas y espera abonar los retrasos salariales antes de abril

Las trabajadoras y trabajadores de la empresa de cultivo de hortalizas y productos de invernaderos Grupo Bonny denuncian, una vez más, que sufren impagos y retrasos del cobro de sus salarios, y califican como «angustiosa» la situación en la que se encuentran desde hace unos cinco años. Todo ello les provoca una mayor incertidumbre por la situación laboral, especialmente entre las aparceras y empaquetadoras, que tienen entre 50 y 60 años, que sólo han trabajado en esa empresa, que no tienen formación u oportunidad en otros sectores y que en la mayoría de los casos sus salarios son el único ingreso de la familia.

El grupo Bonny debe en torno a 2,7 millones de euros a los empleados por las liquidaciones, pagas extraordinarias de este año y del anterior, y zafras pendientes, según el Sindicato Independiente de Trabajadores de Canarias (Sitca).

El pasado día 30 de diciembre los empleados cobraron supuestamente en torno a unos 480 euros por una quincena de días trabajadas. Sin embargo, no han cobrado la paga extraordinaria de diciembre, ni la de julio, ni tampoco las zafras de 2018 y 2019.

José Juan Bonny, administrador de este grupo empresarial, manifestó que esa situación de retrasos en el pago de los salarios de los trabajadores «lo tenemos casi al día», aunque admitió que «debemos algunas liquidaciones de las zafras». «Lo que falta por pagar a los trabajadores es algo más de un millón de euros, no 2,7 millones. Esta situación no es nueva. La ayuda a la hectárea de 2011, tras muchas reclamaciones, se pagó hace dos años.Y se suma el retraso en la compensación del transporte, además de que se complican las exportaciones y hay una gran competencia que lo hace todo más complicado y duro. Encima el Estado no nos ha explicado que pasará cuando se haga realidad el Brexit, consecuencias y medidas», precisó.

Respecto a una solución en el futuro cercano, José Juan Bonny indicó que «esperamos cobrar durante este mes de enero las ventas que hemos hecho en diciembre y confiamos que antes de abril podamos pagar las liquidaciones pendientes»

A la hora de hablar de por qué se producen estos retrasos a la hora de pagar los sueldos, pagas extraordinarias y liquidaciones por las zafras realizadas, José Juan Bonny justificó que «es por el daño tremendo a la tesorería que nos provoca a los agricultores en general, como al Grupo Bonny en particular, el gran retraso a la hora de abonar la compensación por el transporte». «Antes se nos pagaba esa subvención del Estado entre los meses de julio y agosto. Sin embargo, desde hace tres años ocurre el 30 diciembre. Nos hemos reunido dos o tres veces al año en la Delegación del Gobierno y explicamos nuestra situación y el daño que se nos hace», aclaró.

«Quiero destacar que la delegación de Fomento, en Las Palmas de Gran Canaria, ya tiene el trabajo hecho para abonar esa subvención antes, pero por los trámites administrativos se demoran y se paga el 30 de diciembre. No entiendo por qué se tarda tanto. No sé si se produce por la intervención administrativa en Madrid o en la capital grancanaria. Es una maldad porque el Estado tiene ese dinero, que es tan importante para nuestra tesorería, para pagar antes dicha subvención», reiteró .

Por su parte, Antonio Rodríguez Suárez, secretario general del Sitca, formación mayoritaria en este sector de la agricultura, afirmó que la situación es «tremendamente delicada»

«Existe un bache económico desde 2014 en el grupo Bonny, que debe 2,7 millones de euros a los empleados», declaró Rodríguez Suárez. «No puede seguir más esta situación. Las empresas y administraciones tienen que buscar soluciones. Hablamos de salarios mínimos y bajos. La empresa exporta desde octubre y los precios son buenos. El retraso de las ayudas para el transporte ocurre en todas la empresas. Si hay un problema de organización en el grupo Bonny, que se corrija», agregó.

«Las exigencias del sindicato para con la patronal y administraciones son, entre otras: Cumplimiento de las empresas con sus obligaciones con los trabajadores; garantías de que se mantendrá el empleo en el sector, sin precarizacion; plan de viabilidad del sector como establece la Unión Europea para las regiones urtraperiféricas; garantías de mejorar las ayudas para que el sector -con 20.000 puestos de trabajo fijo y 8.000 indirectos- sobreviva y garantice los pagos a sus trabajadores; actualizar las infraestructuras, formación de los trabajadores y mejorar sus condiciones; eliminar la aplicación de los azufres de los cultivos; y un plan estatal de prejubilaciones a los 61 años», recordó Rodríguez.

El grupo Bonny cuenta en la actualidad con casi 2.000 trabajadores en Gran Canaria,1.600 fijos y discontinuos y más de 300 eventuales. Las naves de empaquetado de tomates están en Gáldar, Cruce de Arinaga y en La Aldea de San Nicolás, y las de pepinos se hallan en Cruz de Jerez, Ojos de Garza y en Las Rosas.

Fuente: https://www.laprovincia.es/gran-canaria/2020/01/05/bonny-adeuda-empleadas-pagas-liquidaciones/1241827.html