Antonio Rodríguez, secretario general de STICA, ha criticado duramente la postura de los empresarios y está en la misma línea de la La Confederación Europea de Sindicatos (CES) de denunciar que la «avaricia» de las empresas y su «afán» de alcanzar beneficios impide que existan salarios equitativos, y que los salarios se han «comprimido» por los beneficios transferidos a los accionistas.
Según lo expresa un documento elaborado en el marco de su campaña para reclamar una subida generalizada de los salarios, en el que destaca que Europa necesita aumentos salariales para estimular el crecimiento que es actualmente «demasiado débil».