
Antonio Rodríguez, secretario general de SITCA, manifestó a Sitca.es que desde que estalló la crisis, España es uno de los países desarrollados con mayor desigualdad salarial. La pobreza mata y mata más que el alcohol, el tabaco, la hipertensión o la diabetes. Esta afirmación no es ideología, es la constatación de un estudio científico publicado en la prestigiosa revista médica The Lancet. En España hay 13 millones de personas pobres, tres millones de ellos son trabajadores con empleo (y hay que sumar más de cuatro millones de pensionistas que cobran pensiones por debajo del umbral de la pobreza); cifras que -me imagino- aumentarán en breve si la inflación sigue subiendo. Alcanza ya el 3%, y los sueldos se mantienen congelados o con subidas irrisorias, y no digamos las pensiones que han subido solo un 0,25%, con las políticas de este Gobierno que visto lo visto no van a cambiar.